Sólo veo el reloj hasta que me canse de caminar a su lado, sé que los vientos se aproximan y que todo esto cerrará bien, quiero hacerles bien.
No hay verdad más sincera que la muerte, y más justificada por amor que es el sentimiento más noble y genuino.
Creo que perder el ala fue casi peor que los parlantes que se apagaron cuando el perro mordió el cable y la música estaba sonando al palo.
Me duele la cabeza.
Pero no me duele escribir esto.
Me dolés vos.
Me duelo yo.
Ganaron